Dentro de un entorno rural, inmersa en la Reserva de la Biosfera de Monfragüe, encontramos esta casa-botica señorial de principios del s. XIX perteneciente al antiguo boticario del pueblo. Lugar idóneo para desconectar y relajarse, además de disfrutar en plena naturaleza y admirar la belleza del norte de Extremadura. La arquitectura de la casa evoca la tradición de las edificaciones de la época, ya que durante su rehabilitación se ha conservado su esencia. Dispone de ocho habitaciones. Todas están adecuadas hasta el más mínimo detalle para que su estancia sea placentera.