Es la golondrina más urbana. Anida bajo cornisas de edificios en colonias formadas por nidos de barro en forma de copa cerrada con una pequeña entrada. Es muy oscuro en dorso alas y cola, con irisaciones azuladas y partes inferiores y mancha en la base de la cola blancas. Se alimenta de insectos que captura en vuelo a gran altura, y regresa cada año desde África para criar en Extremadura en primavera, para marcharse a finales de septiembre.